sábado, outubro 28, 2006

«Lo seres humanos somos diferentes en gustos, en inteligencia, en vocación y aptitudes. También hay lumbreras y hay tarugos, y lo justo y lo igualitario debe consistir en la libre oportunidad de acceso a la educación; no en que una vez dentro de ella todo el mundo sea tratado igual, lo merezca o no, y reciba un titulo universitario tan de trámite como el carnet de identidad o el libro de familia. Un sistema educativo así es un barrizal donde se enfangan lo mismo la mediocridad que el talento. Y no tiene más fin que tranquilizar a padres estúpidos, a alumnos perezosos o incapaces, a profesores con pocas ganas de merecerse el jornal, y a políticos acostumbrados a humillar las palabras educación y cultura hasta los niveles miserables de su propio analfabetismo y su propia incompetencia.»

Con ánimo de ofender, Arturo Pérez-Reverte